A menudo elegir la montura no resulta una tarea sencilla. Después de realizar el examen visual hay que elegir gafa y para mucha gente, ponerse delante del espejo y elegir su futura montura, se convierte en el peor momento pues, piensan que no les va a sentar bien ninguna gafa.
Cierto es que hoy en día una gafa no es un simple complemento de imagen, es un conjunto estético que refleja la personalidad y autenticidad de cada persona. Realmente no es un momento tan complicado, es importante tener en cuenta una serie de aspectos, como por ejemplo identificar el tipo de cara del cliente.
- Cara redonda: Este tipo de cara se caracteriza porque la línea del pelo es redondeada, al igual que la barbilla. A la hora llevar gafas, recomendamos monturas más angulosas para compensar la redondez facial y dar una imagen más equilibrada.
- Cara triangular: En este caso la cara suele tener forma de óvalo sin cambios bruscos de volumen per, desde el pómulo decrece de forma marcada hasta el mentón, quizá los pómulos pueden ser la parte más prominente del rostro. La barbilla es puntiaguda. Se recomienda que el volumen de la montura esté especialmente a la altura de sienes o cejas.
- Cara ovalada: Se dice que éste es el rostro ideal y que acepta cualquier tipo de montura.
- Cara cuadrada: En este caso la línea del pelo es recta y la mandíbula cuadrada. Las formas que mejor sientan son las líneas rectas, pues reequilibran las proporciones del rostro.
Otro aspecto muy importante a tener en cuenta es el tipo de gustos que tienes, pero eso algo muy personal y seguro que sabrás decidirte.
Esperamos que con estos simples consejos la elección de tu gafa sea mucho más sencilla.